EL PAPEL DEL FACILITADOR EN EL TRABAJO CON LOS GRUPOS

"Háblame y quizás lo olvide. Enséñame y quizás recuerde. Particípame y aprenderé"
(Benjamín Franklin)

EL PAPEL DEL FACILITADOR EN EL TRABAJO CON LOS GRUPOS
En el trabajo en los grupos, el papel que desempeña el facilitador es fundamental para producir conocimiento en forma colectiva. Su rol consistirá en:
1. Explicar claramente cuáles son los objetivos de la plática y cuál es el tiempo que se dispone para contestar a las preguntas planteadas.
2. Nombrar un asistente.
3. Explicitar su función a los participantes. Aclarar que su papel como facilitador es promover la discusión del grupo y recoger las respuestas a las preguntas y no opinar en relación a ellas.
4. Fomentar la participación de todos los integrantes. Para ello solicita la opinión de aquellos que no la manifiestan (¿A ver que piensan los que están callados?), evitando de forma amable las reiteraciones de quienes son muy activos y trata de que no se produzcan largas discusiones para centrarse en los objetivos del plática.
5. Garantizar que se cumpla con lo anterior y para ello aporta, de ser necesario, conocimientos generales con respecto al tema sin opinar acerca de cómo se manejaría él en este caso en particular.

¿QUE SE ESPERA DE UN BUEN FACILITADOR?
El facilitador debe promover la discusión más allá de una mera conversación. La discusión se caracteriza por ser un proceso donde dos o más personas intercambian información para alcanzar una meta común.

Para ello se debe discutir tomando en cuenta ciertos aspectos:

 Tener claro el objetivo.
 Abordar los temas y llegar a conclusiones.
 Establecer reglas con el acuerdo de todos.
 Delimitar el tiempo individual para participar.
 Fomentar la participación de todos.
 No repetir los discursos.
 No intervenir por segunda vez hasta que todos hayan participado.
 Manejar las propias ansiedades.

LO QUE NO DEBE HACER EL FACILITADOR
• Dar una clase o conferencia en vez de promover un diálogo u orientar la discusión.
• Hablar demasiado perdiendo su rol.
• Los participantes no se animan a hablar, no dialogan entre ellos y solo responden a las preguntas del facilitador.
• Los participantes no se han preparado para la plática.
• El facilitador no se ha preparado para la plática.
• Uno o pocos participantes dominan la discusión e inhiben la participación de la mayoría.
• Los participantes quieren que se les den las soluciones a los problemas más que a discutirlos.

LA IMPORTANCIA DE PROMOVER EL DIALOGO
El trabajo en pequeños grupos debe promover el diálogo entre los participantes. El diálogo presupone un estado de avance de los conocimientos y creencias iniciales de los integrantes. La meta es la creación y pertinencia de nuevas ideas. A través del diálogos, las personas pueden entender las diferentes perspectivas, “filtros” o lentes” con los que se percibe la realidad sobre un mismo aspecto. El diálogo lleva a niveles superiores de confianza, de desafíos colectivos, de construcción de nuevos conceptos, de compartir ideas, entre otros.

.ALGUNAS DE LAS DESTREZAS DE DIÁLOGO QUE SE PUEDEN PRACTICAR Y APRENDER SON:
 Permitir que los otros terminen la línea argumental de sus pensamientos
 Respetar los pensamientos de los otros
 Respetar los sentimientos de los otros
 Respetar las opiniones de los otros
 Respetar las realidades de los otros
 Escuchar atenta y profundamente sin necesidad de arreglar, juzgar, discutir o resistir.

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